Una corta reflexión

Persevera y triunfarás...!, dice el gran dicho, y si reflexionamos sobre eso, nos daremos cuenta de que no es solo un dicho, si no una gran verdad. La diferencia que hay entre las grandes personas de la historia y nosotros tal vez sea nada más que la perseverancia. Tal vez nosotros comencemos nuestros objetivos de igual manera que ellos pero no perseveremos de la misma forma. Comenzamos bárbaros con muy buena voluntad todo "pinta muy lindo", pero luego poco a poco de haber comenzado vamos aflojando, luego perdemos la ilusión y finalmente terminamos abandonándolo. Y luego usamos estas expresiones: ¡fue una lástima!, ¡esperaba tanto!, ¡prometía tanto! Al final de cuentas, terminamos quedándonos con las manos vacías, para luego volver al mismo juego, una y otra vez. Sólo de nosotros depende, de nuestro tesón y constancia... aprovechar nuestros talentos, aquellos que nos fueron otorgados a nosotros al ver la vida por primera vez. Entonces, recordemos que sin constancia ninguna virtud llega ser grande.